El tema es el que rezo en el título. Un problema que está extendiéndose cada vez más y que supone un riesgo para todos los ciudadanos.
Un reciente estudio revela que cada vez son más los españoles que antes de acudir a la consulta de un médico prefieren consultar los síntomas que tengan en Internet en busca de alguna respuesta y ver si pueden tratar su enfermedad ellos mismos sin tener que pasar por el médico.
Realmente es un peligro la cantidad de aplicaciones para dispositivos móviles y páginas de Internet que existen con cantidades ingentes de información sobre diversos síntomas y que podrían ser y en que puede derivar.
El primer problema con el que nos topamos es que no sabemos quién ha escrito el texto que leemos sobre los síntomas. Puede ser tanto un médico como un albañil sin más conocimiento de medicina que el de ponerse una tirita.
Por otro lado tenemos el problema que hay cientos de miles de enfermedades que comparten síntomas y que sólo una persona que ha estudiado medicina y gracias a su criterio puede indicarnos que enfermedad padecemos, o incluso si padecemos una enfermedad o no.
Al parecer la agencias correspondientes de sanidad se están poniendo a intentar solventar este problema mediante varias propuestas como una especie de sello de confianza para las web que traten sobre salud. Algo parecido al sello de confianza online de los que gozan las tiendas online, pero en el área de salud.
Pero esto conlleva al problema de que la sanidad se renueva constantemente, y los contenidos de una web pueden ser renovados o no, pudiéndose dar el sello de confianza sanitario pero más adelante dejar de estar actualizada y por ende dejar de ser una web sanitaria de confianza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario